La felicidad, la riqueza, la salud, la tranquilidad, el propósito de vida, la popularidad, etc. Son en su mayorÃa objetivos que casi todas las personas vamos por la vida buscando encontrar. Los buscamos en lugares, en otras personas, en hobbies, en religiones, en empleos, en mascotas, Etc. Pero es algo asà como cuando le llamas a tu pareja, amigo o amiga y le dices que no encuentras tu celular y no te das cuenta que estás llamando desde tu celular. Es decir, lo tienes y no te das cuenta.
Sé que es un ejemplo muy simplón, pero describe fácilmente a lo que pretendo llegar. Algunos de esos objetivos que menciono, son externos y otros internos, sin embargo, todos los buscamos fuera de nosotros. ¿Porqué? Porque lo que hemos aprendido desde que arribamos a esto que llamamos vida, nos enseñaron a enfocar nuestra atención hacia afuera y nunca hacia dentro. Hay todo un universo afuera de nosotros, pero también hay un universo dentro de nosotros. Y nos enseñaron a dar por sentado que lo que hemos aprendido de los padres, las escuelas, religiones y la sociedad, es la verdad y eso no se cuestiona, no importa que tan nula lógica tenga o contradictoria.
No nos damos cuenta que los supuestos conocimientos que tenemos, son solo en su gran mayorÃa creencias. El 99% de lo que hemos aprendido no nos consta. Nuestros padres, maestros, polÃticos, expertos, cientÃficos, doctores, sacerdotes y unos buenos amigos nos lo dijeron con mucha seguridad que esto, aquello o lo otro… Es la verdad verdadera certificada por una renombrada institución, también certificada. Pero nunca nos dijeron quien certificó a la renombrada institución, ni porqué es renombrada, ni explican los conflictos de intereses entre esas instituciones y los certificadores certificados de que tal o cual conocimiento es lo más verdadero de la verdad real verdadera… Espero noten este ligero sarcasmo sarcástico en estas redundantes lÃneas de redundancia.
Ni a nuestros padres, maestros, polÃticos, expertos, cientÃficos, doctores, sacerdotes y unos buenos amigos, les consta nada de lo que nos enseñan, comparten o aseguran. Y ni metamos a los medios bien llamados de desinformación. Mucho nos han dicho los pocos pensadores que valen la pena escuchar, de que lo que es menos común en el ser humano, es precisamente la lógica y el sentido común. Pero solo nos reÃmos y seguimos al rebaño del cual nos sentimos honorables miembros repetidores de lo que ahà se repita más.
¿No me expliqué claramente? Ok… Nunca nos enseñaron a pensar, nunca nos enseñaron a seguir a la lógica, por supuesto, menos a usar el pensamiento, primero autocrÃtico y después el pensamiento crÃtico. Para aprender a conocernos. No sabemos vivir con nosotros mismos por eso tememos a la soledad, lo que nos lleva a depender o, mejor dicho, a Inter depender de otros. Entonces, como se nos enseñó información contradictoria, parcial, manipulada, que no nos consta su veracidad y cuya aplicación o funcionamiento depende de otros, ya sabes, expertos, autoridades, mesÃas, etc. la mayor parte de las veces y que además, lo que pensemos, sintamos, digamos o hagamos, debe ser aprobado por la sociedad que se compone de los antes mencionados… Andamos con todos los objetivos que creemos que vinimos a lograr, perdidos. Por cierto, también los objetivos mencionados, nos los dijeron los mismos antes mencionados. Es un mencionadero ya sé, pero es que el cordel está muy enredado.
Realmente somos algo muy especial los seres humanos para vivir tan alegremente en este amasijo de laberintos, tanto fÃsicos como mentales, tanto religiosos como espirituales, tanto emocionales como matemáticos. Se nos distanció tanto de nuestro interior que creemos que somos y que nos define el afuera.
Muchos ni si quiera se atreven a fantasear con lo que realmente les llama su ser y se enfrascan en la batalla de ser exitosos de acuerdo a lo que nos dijeron que era tener éxito en la vida y aquellos que lo logran, sienten que algo les falta, sienten la amargura extraña de no haber llegado.
¿Qué es lo que siempre desde pequeño te llama la atención? El arte, la escultura, la pintura, la filosofÃa… Ha te vas a morir de hambre me dijo mi padre. Eso es lo que a el le enseñaron y también vio en su vida como experiencias. Y me lo dijo con todo el amor que me tiene. ¿Qué carrera vas a estudiar? Dentista -Te conviene más odontólogo- Te dice otro.
Se que mandar a todo el mundo al rancho la chingada y aprender a tomar decisiones que no vayan de la mano de lo que otros piensen es atemorizante… Que no queramos reconocerlo conscientemente, es harina de otro costal. El miedo es el principal combustible de esta máquina social de control, también llamada matrix, donde Las creencias limitantes nos convencen de que NO PODEMOS y nos anulamos nosotros mismos.
En cambio, cuando aprendemos a mirar hacia adentro de nosotros y realmente empezamos a conocernos, descubrimos aquellos dolores, rencores, traumas, que mentalmente nos anulaban, pero también redescubrimos nuestros dones, habilidades y nuestra vocación. Entonces te liberas de cadenas y vuelas, lo digo de manera figurada, con aquello que anhelas. Si te fijas nada tiene que ver con obtener algo o complacer a otros. Sino conocerte tú, entenderte, aceptarte y permitirte ser afuera desde dentro. Vivir en congruencia entre lo que sientes, piensas, dices y haces, respetándote a ti y respetando todo lo que hay fuera de ti. Es cuando te haces consciente de que lo que buscabas, siempre lo has tenido en ti, pero lo buscabas afuera. 1CP