Columna Mensajes
Una lucha de años fue tirada por la borda con 291 votos de diputados y diputadas, de los partidos Morena, PVEM y PRI, que decidieron con esto proteger a un hombre caracterizado por su violencia, para no ser juzgado ni sentenciado, gracias al fuero que como diputado federal de Morena tiene.
Cuauhtémoc Blanco Bravo (vaya apellido materno), es ex futbolista, ex gobernador de Puebla, y actual político, que se caracterizó siempre por su violencia física y verbal como deportista.
Su violencia lo llevó a atacar física y verbalmente a jugadores, árbitros, comentaristas y aficionados. Sus señas obscenas llegaron a ser festejadas por todos, cuando de ridiculizar al contrario se trataba.
En sus entrevistas, siempre justificó sus actos violentos, y jamás se le escuchó ofrecer una disculpa, o arrepentirse de sus actos.
Por eso, quien escribe no tiene ninguna duda de que este tipo haya sido, y siga siendo, un violentador de mujeres en todos los sentidos.
Para la vergüenza histórica quedarán esos 291 cómplices, hombres y mujeres, que votaron para protegerlo, y para el reconocimiento absoluto los 158, mujeres y hombres, que buscaron enfrentarlo a la justicia, para que comprobara la inocencia que el ex futbolista pregona tener, o para que pagara conforme a la ley, en caso contrario.
El reconocimiento alcanza más a las diputadas de Morena, que sin miedo, no jugaron a las patadas con el “cuau”, y contra todo pronóstico, esta vez se apartaron de su propio partido.
También a los del PT que esta vez se desmarcaron como nunca antes había sucedido, del partido con el que habían sido incondicionales, para votar a favor del desafuero.
También vaya el reconocimiento a las del PAN y MC, que con rigurosa asertividad y congruencia, intentaron llevar al acusado de violación por su media hermana, a enfrentar a la justicia.
En síntesis:
1- Quedó demostrado que esa narrativa feminista, en el sentido de promover la no violencia en contra de ellas, es solo eso, una narrativa estulticia.
2- Está claro que no solo se redimen culpas volviéndose político en estos tiempos, sino que además se alcanza inmunidad e impunidad para mantenerse como violentador.
3- Demostraron con un solo voto, que el machismo, seguirá mandando en México.
Como nota al margen, recuerde usted que Alejandro Moreno, al alito para muchos, también enfrenta una solicitud de desafuero, solicitada por la fiscalía de Campeche, que lo acusa de enriquecimiento ilícito.
¿Ya entendió usted porque el PRI votó a favor de no desaforar a Cuauhtémoc Blanco?
¡Intercambio de favores, pues!
Por último, y en un tema que hay que ver por separado, y que nadie está mencionando, es la “mea culpa” de la fiscalía de Puebla, a la que señalaron de haberse equivocado en la integración del expediente en contra de Cuauhtémoc Blanco Bravo, acusado de violación por su media hermana.
Este error, dijeron diputadas de Morena (especialmente ellas), fue la que las llevó a considerar que no se podía juzgar ni sentenciar al “macho” que defendieron.
¿En qué se equivocó el fiscal Uriel Carmona, de Puebla, en la integración de esta carpeta de investigación?
¿Por qué lo destituyeron luego de la votación?
¿A que se refiere Edgar Maldonado, fiscal que lo sustituye, cuando dice que revisará las posibles omisiones de su antecesor?
Sin duda, la Fiscalía General del Estado de Puebla tiene mucho que decir en este tema.
Por lo pronto, el cuau acaba de meter gol, con las dos manos por delante.
¡Y se verán cosas peores!